De ser la primera Vicepresidenta de EE.UU. a luchar incansablemente por los derechos de las mujeres, las minorías y la justicia social, Kamala Harris se ha consolidado como un símbolo del cambio. Su trayectoria política, llena de logros y obstáculos, refleja su inquebrantable compromiso por mejorar la vida de los estadounidenses.
Créditos: WhiteHouse.gov, BBC
Kamala Harris. La segunda mujer, la primera afroamericana, la primera estadounidense en ser Vicepresidenta de los Estados Unidos, que compitió por la presidencia de este país. Junto a Biden, creó un número récord de empleos, mantuvo un bajo nivel de desempleo y promovió la creación de pequeñas empresas, más que la administración anterior. Así lo sostiene WhiteHouse.gov
Kamala es líder. Lucha por la libertad de las personas en su máxima expresión, como buena demócrata que es; así como alguna vez lo hicieron Kennedy, Carter, Clinton, Obama, Biden. Batalla por los derechos de las mujeres, para que puedan tomar decisiones sobre sus propios cuerpos. Pelea por el derecho al voto, por el acceso a agua potable y al aire limpio.
Cree en que sí es posible vivir en su país, sin la amenaza de la violencia armada. Para la candidata presidencial, ascender en el escenario político no fue tarea fácil. Fue un camino complicado en el cual hay tuvo que llenarse de mucha paciencia para superar todo tipo de obstáculos, y finalmente convertirse en la primera mujer multicultural, candidata a la presidencia de Estados Unidos.
Kamala Harris: de Fiscal a Senadora, un legado de lucha por la justicia y la igualdad
Fue Fiscal de Distrito de San Francisco, Fiscal General de California y Senadora de los Estados Unidos, antes de ser Vicepresidenta, y por qué no, futura presidente. Aún no lo sabemos. Lo que sí sabemos es que, desde estas altas posiciones, ha trabajado en unir a las personas con el fin de generarles más oportunidades, mejorar su calidad de vida y proteger sus libertades fundamentales, antes que nada.
Como Fiscal de Distrito en 2004, lideró el movimiento por los derechos LGBTQ+ a nivel nacional, oficiando la primera boda entre dos personas del mismo sexo, después de que se revocara la Proposición 8: una medida electoral de California, que modificó la Constitución del estado para establecer que «solo el matrimonio entre un hombre y una mujer es válido o reconocido en California.» Esta proposición fue controvertida. Anuló temporalmente el derecho de las parejas del mismo sexo a casarse, lo que desató protestas y desafíos legales.
Y eso no es todo. Estableció la unidad de justicia ambiental, creó un programa para ofrecer a drogadictos “primerizos” la oportunidad de obtener un diploma de secundaria y encontrar empleo; y en los noventa, se unió a la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Alameda, donde se especializó en procesar casos de agresión sexual infantil.
Al ascender como Fiscal General en 2010, Kamala enfrentó a aquellos que se aprovechaban del pueblo estadounidense. De acuerdo con whitehouse.gov, Kamala ganó un acuerdo de $20 mil millones para los californianos, que habían perdido sus casas por embargo.
Además, llegó a otro acuerdo, esta vez de $1.1 mil millones, para estudiantes y veteranos que fueron engañados por una empresa educativa con fines de lucro. Y como Senadora de los Estados Unidos en 2017, la posible futura presidente de Estados Unidos, promovió leyes para combatir el hambre, mejorar la atención médica materna, expandir el acceso al capital para las pequeñas empresas, revitalizar la infraestructura estadounidense, luchar contra la crisis climática. También trabajó para mantener al pueblo estadounidense a salvo, de amenazas extranjeras y redactó leyes bipartidistas para ayudar a garantizar la seguridad de las elecciones estadounidenses.
Sus votos en el Senado, fueron claves para su ascenso. Emitió uno que aseguró la aprobación de la histórica Ley de Reducción de la Inflación: la mayor inversión jamás realizada en la lucha contra la crisis climática. Presidió otro, sin precedentes, para confirmar a la primera mujer afroamericana, la jueza Ketanji Brown Jackson, en la Corte Suprema; en tanto trabajó de la mano junto con el Presidente Biden para que mujeres y personas de color tuvieran una representación histórica en el gobierno federal. Harris lanzó por primera vez su candidatura a la presidencia hace cinco años.
Su campaña, inyectó energía a votantes liberales, recaudando un récord de 671 millones de dólares en donaciones en los últimos dos meses, casi el triple de lo que su rival republicano Donald Trump ha logrado.
Su candidatura presidencial de 2020, comenzó con grandes multitudes y momentos importantes en los debates, pero lastimosamente se desvaneció cuando Kamala “luchó por articular su ideología y plataforma política”. Así lo asegura una de sus biografías publicadas por la BBC. Así que su campaña se disolvió en menos de un año. Y fue precisamente el presidente Biden quien puso de nuevo en el escenario nacional a Kamala e incluirla en su fórmula presidencial en 2020.
De nuevo, el destino jugó a favor de Harris. En su faceta en la Casa Blanca como Vicepresidenta, se enfocó en aprobar la Ley de Reducción de la Inflación y el Plan de Rescate Estadounidense durante la pandemia. También lideró la problemática de entrada de migrantes indocumentados a través de la frontera entre EE. UU. y México, tan criticada por republicanos y algunos demócratas.
Y algo muy importante. Harris ha liderado la lucha por los derechos reproductivos y la libertad de las mujeres para decidir. De hecho, destacó los daños causados por las prohibiciones del aborto después de que la Corte Suprema revocara Roe .vs. Wade, que garantizaba el derecho al aborto, en 2022; y continúa criticando a los republicanos por restringir el acceso al aborto en todo el país. Podríamos decir que, cada paso del camino de Kamala, ha sido guiado por aquellas palabras que pronunció la primera vez que estuvo en esas salas de audiencias: “por la gente.”
Kamala Harris: De sus raíces multiculturales a su camino hacia la Casa Blanca
Harris nació en Oakland, California, rodeada de una comunidad diversa y de una familia amorosa e inmigrante de origen jamaiquino por el lado de su padre, e indio por el lado de su madre, Shyamala Gopalan; quien era investigadora científica del cáncer de mama.
