Descubre Lágrima, el lado más fresco, floral y sorprendente del Oporto blanco: una joya poco explorada que ahora encontramos en México, y que conquista paladares, y eleva cualquier maridaje con elegancia.
Hemos oído hablar de los Ruby, de los Tawny, pero poco se conoce sobre los vinos de Oporto blancos, producidos en la región del Douro, en el norte de Portugal, bajo la denominación oficial Porto/Douro DOC.
Expresivos y dulces (ideales para servirse bien fríos), se elaboran exclusivamente a partir de uvas blancas. Su carácter depende tanto del tipo de envejecimiento como del grado de azúcar que el enólogo decida otorgarles.
Esta categoría fascinante y poco explorada dentro del universo de los Oportos portugueses ofrece frescura, complejidad aromática y una versatilidad gastronómica sorprendente, que incluso puede superar a la de sus primos tintos: los Ruby o los Tawny.
Lágrima Blanca: una joya dorada para beber bien fría
En bodegas Ramos Pinto, por ejemplo, encontramos el Lágrima Blanco. Una vez embotelladas estas joyas portuguesas, están listas para disfrutarse.
Sin importar el estilo, el Oporto blanco es ideal para servirse —como aperitivo o para acompañar un amuse-bouche, una entrada o un postre— a una temperatura de entre 6 y 10 °C, y conservarse de pie, en un lugar fresco, seco y alejado de la luz.
Si buscas un Oporto blanco afrutado, intenso y floral, con aromas a manzanilla, flor de naranjo, pera y melocotón, con notas de miel y un final muy persistente, Lágrima Blanco es para ti.
Elaborado a partir de una cuidadosa selección de uvas blancas autóctonas del Douro como Códega, Malvasía Fina, Viosinho, Gouveio y Rabigato, es un ícono entre los vinos de Oporto que tienes que probar.
Estas uvas, provenientes de regiones donde se alcanza un alto grado de madurez, se someten a una intensa maceración con pieles, siguiendo la antigua tradición del vino de Oporto.
¿Qué aportan estas uvas blancas? Acidez, frescura, un cuerpo increíble y aromas florales y frutales inolvidables.
Su color dorado enamora, seguido de notas florales como el azahar, que dan lugar a una sensación de boca ligera, untuosa, con sabores a fruta madura y confitada, envueltos en una frescura intensa y persistente.
Esa untuosidad se debe a la mínima cantidad de azúcar residual, característica del método de elaboración, en el que la fermentación se interrumpe con la adición de aguardiente vínico, preservando los azúcares naturales del mosto.
Es importante recordar que, al ser un Oporto blanco joven, lo ideal es consumirlo entre dos y tres años después de su compra.
El origen divino (y legal) de su nombre
¿Por qué se llama «Lágrima»?
¿Por qué lleva la imagen de Jesucristo en la etiqueta?
Le preguntamos a Nuno Maia, de Ramos Pinto, quien estuvo de visita en México. Nos contó que, en realidad, antes se llamaba “Lágrima de Cristo”, pero tuvieron que retirar ese nombre y dejarlo simplemente como “Lágrima”.
¿La razón? En la región italiana de Campania, al sureste de Nápoles y en las faldas del volcán Vesubio, existen vinos tranquilos con denominación de origen controlada (DOC) bajo el nombre Lacryma Christi.
Para evitar problemas legales, decidieron renombrarlo.
“Hasta tuvimos que retirar la corona de espinas que estaba sobre la cabeza de Jesucristo”, comenta Maia.
Maridajes recomendados
Lágrima Blanco funciona de maravilla con foie gras, pero también acompaña de forma deliciosa una ensalada de calamares a la parrilla con vinagreta, así como almendras, aceitunas y queso de cabra. También se lleva bien con quesos suaves o azules, y postres a base de frutas o cremas.
Y es que, sin importar si es blanco, Tawny o Ruby, el maridaje del Oporto con foie gras es uno de los mejores del mundo.
Esto se debe a que el foie, al ser graso, untuoso y salado, se complementa perfectamente con las notas dulces, ácidas y aromáticas del Oporto, logrando un equilibrio excepcional en boca.
Sabemos que los sabores dulces suavizan los salinos, y que los ácidos “limpian” el paladar, cortando la grasa del foie y evitando que resulte empalagoso.
Además, es una tradición tanto en Portugal, Francia y el norte de España servir foie con vinos dulces o fortificados como el Oporto, Sauternes, Tokaji (Hungría) o los Late Harvest (cosechas tardías). Ambos productos —foie y Oporto— se asocian con lujo, elegancia y refinamiento en la mesa, como bien sabe todo sibarita.
Y si prefieres algo más fresco y si lo que buscas es una forma más ligera de disfrutar un Oporto blanco, te recomendamos probarlo como aperitivo, mezclado con agua tónica, una rodaja de limón o pepino. Refrescante, aromático y perfecto para el verano.
