En la etiqueta de un buen whisky se esconde más que un número: su edad. Ese pequeño detalle revela el mínimo de años que el destilado pasó madurando en barricas de roble, garantizando calidad y autenticidad. Conoce por qué esta información es esencial, cómo influye en su sabor, y qué implica la tradición. ¿Estás listo para descifrar el misterio de tu whisky esta temporada?
Por: Carlos Andrés Ramírez C. * IG @carlosandresramirezc
*Administrador hotelero, Whisky Master, Sommelier, asesor de vinos y licores certificado por WSET, catador certificado de destilados mexicanos. Gerente en Pernod Ricard México, con más de 15 años de experiencia en el sector de bebidas en Latinoamérica.
Conocer la edad del whisky que vas a disfrutar (o que estás disfrutando en este momento), aprovechando que es fin de año, es esencial para determinar el mínimo de tiempo que el whisky envejeció en barricas de roble francés y/o americano.
De hecho, este período de tiempo transcurrido siempre debe aparecer escrito en la etiqueta del destilado, ya que la certificación depende de ese número de años.
Chivas Brothers, la casa responsable de la producción de una de las marcas de whisky más reconocidas a nivel mundial por ejemplo, sostiene una tradición que se ha mantenido durante dos siglos; y, por lo tanto, de acumulación de experiencia. De hecho, los Master Blenders de Chivas se han pasado todos los secretos inherentes a un componente trascendental, en la cadena productiva de sus whiskys: el añejamiento.
Cada barrica, es certificada e inspeccionada anualmente para corroborar su edad y evolución, con el fin de determinar la calidad del whisky que ahí se está añejando.
Una vez cumplido su respectivo tiempo de almacenamiento, es mezclado con otros whiskies que tienen la misma edad de añejamiento y/o una edad superior, para dar vida la mezcla perfecta, que ofrece el aroma y sabor característicos de cada marca.
Qué dice la ley

Ahora bien, por ley, el número de declarado en la etiqueta de una botella de whisky, representa el número de años que añejó el whisky más joven de esa mezcla.
En Escocia, estas normas o reglas son establecidas y reguladas por la Scotch Whisky Asociation, quien a su vez, es reglamentada por el gobierno. Este tema es estricto y muy riguroso, ya que no solo se refiere a la calidad o al sabor del producto final sino (y mucho más importante); a la honestidad y ética del productor, que de manera transparente, ofrece el producto que dice haber embotellado.
Es importante que sepas, que, diferencia de otros licores como el cognac o el ron (los cuales determinan su número de añejamiento con un promedio de edad o con mezclas de barriles de diferentes años por medio del sistema solera), el whisky debe sí o sí permanecer estático, en barricas de roble, añejándose mínimo el número de años que aparecen en su etiqueta.
Todos los whiskys de Chivas Regal, por ejemplo, han sido madurados como mínimo durante 12 años. Sin embargo, en el portafolio de esta casa escocesa hay otras dos estrellas que han sido gestadas durante periodos más largos de reposo: Chivas Regal 18 años Gold Signature y, Chivas Regal 25 años.
¿Por qué es importante declarar la edad en el whisky?

Declarar la edad en la botella de whisky, es la única garantía que tienes como consumidor, acerca de la calidad de la mezcla que estás comprando.
Muchos desconocen que por ley, para que un whisky pueda ser determinado como “Scotch” el líquido más joven de esta mezcla, debe añejarse como mínimo tres años en barriles de roble. Es decir, cuando un whisky no declara edad en la etiqueta, legalmente puede tener whiskies de tres años dentro de su mezcla.
¿Todos los whiskies premium y super premium declaran la edad?
No necesariamente. Si bien es cierto que la mayoría de los whiskies escoceses que no declaran edad en la etiqueta son whiskies jóvenes, en el mercado se encuentran whiskies de alto nivel que no declaran su edad.
Simplemente mencionan en la etiqueta “mezcla de whiskys viejos o raros”. Debido a que en sus mezclas se encuentran whiskies viejos y jóvenes, estos no pueden declarar la edad, pues aparecería la edad del whisky más joven y no la del más añejo.
Debido a la evaporación del whisky durante su añejamiento, conocida como «la porción de los ángeles» o el “angels share”, el whisky aumenta su costo.
Ese porcentaje de evaporación es esencial para que el whisky absorba aromas y sabores de la madera y el medio ambiente; en tanto corresponde a más o menos un 2 por ciento anual.
Por ejemplo, un whisky que se añeja durante 40 años, pierde el 75% de su contenido en el barril, lo que hace verdaderamente difícil encontrar en el mercado, whiskies de estos años de añejamiento, con la edad declarada en su etiqueta.
De hecho, uno de los whiskies con edad declarada en la etiqueta más añejos es Royal Salute 38 años de edad Piedra del destino. Por cada botella de este whisky que se envasa, se pierden tres en evaporación en los barriles.
Así que ya sabes: asegúrate siempre buscar la edad en las etiquetas de whisky. Es la única manera en la que te certifican cuánto tiempo de añejo tiene el «scotch» que te vas a tomar, en este fin de año.