En un trágico incidente que ha sacudido a Israel, dos soldados de reserva perdieron la vida en un ataque con drones reclamado por Hezbollah el lunes por la tarde.
Créditos: Times of Israel
El Ejército de Defensa de Israel (FDI) confirmó que los soldados, identificados como el Sargento Mayor (res.) Dan Kamkagi, de 31 años, de Kfar Oranim, y el Sargento Mayor (res.) Nahman Natan Hertz, de 31 años, de Elazar, fueron asesinados en el ataque perpetrado cerca de Metula, en el norte de Israel.
Según el comunicado emitido por las FDI, se realizó un intento por interceptar el dron explosivo, pero lamentablemente fracasó, resultando en la trágica pérdida de los dos soldados. Además, otro soldado resultó levemente herido en el incidente.
Hezbollah, el grupo terrorista con sede en el Líbano, se adjudicó la responsabilidad del ataque. Como respuesta, las FDI llevaron a cabo ataques aéreos contra instalaciones utilizadas por Hezbollah en el sur del Líbano, así como un puesto de lanzamiento de cohetes en Ayta ash-Shab.
El ataque con drones se produce en medio de tensiones cada vez mayores en la región. Previamente, se lanzaron al menos 30 cohetes desde Líbano hacia las Alturas del Golán, según informaron las FDI. Hezbollah afirmó que este ataque fue en respuesta a una operación anterior del IDF en el noreste del Líbano.
Desde el 8 de octubre, fuerzas lideradas por Hezbollah han llevado a cabo ataques contra comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera casi a diario, argumentando su acción como un apoyo a Gaza en medio del conflicto allí.
Las pérdidas en ambos lados de la frontera han sido significativas. En el lado israelí, nueve civiles han perdido la vida, junto con 13 soldados y reservistas del IDF. Hezbollah ha sufrido bajas también, con 290 miembros muertos durante los enfrentamientos en curso, la mayoría en Líbano.
Israel ha reiterado su postura de defensa y ha advertido sobre la posibilidad de una escalada mayor si Hezbollah no cesa sus ataques y se aleja de la frontera. Mientras tanto, las tensiones en la región siguen en aumento, con comunidades del norte de Israel en alerta y miles de personas evacuadas en previsión de un mayor conflicto.