La circulación de medicamentos falsificados o de calidad inferior en México es un problema preocupante que afecta a la salud y el bienestar de la población, según advirtió este jueves Osiris López, portavoz de la Coalición por la Salud Digital en México (Cosadim).
Créditos: Infobae
López señaló que, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 10% de los medicamentos disponibles en el país son falsificados, lo que representa un riesgo significativo para quienes los consumen. «La OMS menciona que, en el mejor de los casos, un medicamento falsificado simplemente no surtiría el efecto deseado y la persona no se cura, pero si tiene algún activo químico no permitido, puede causar la muerte», destacó.
La ingeniera bioquímica explicó que el comercio de medicamentos falsificados, que incluye productos contaminados, caducos o con ingredientes activos incorrectos, representa una industria que mueve más de 30.000 millones de dólares en naciones de bajos y medianos ingresos, según datos de la OMS.
En el caso específico de México, la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (Unefarm) estima que las pérdidas anuales debido a esta situación ascienden a 32.000 millones de pesos (aproximadamente 1.933 millones de dólares).
López subrayó la importancia de abordar de manera urgente el problema de los medicamentos falsificados y combatir su venta ilegal. Una de las principales dificultades para enfrentar esta situación, según López, es la falta de digitalización en el sector de la salud en México, lo que dificulta el acceso a la atención médica.
Por esta razón, en 2023 se estableció la Coalición por la Salud Digital en México, conformada por empresas y asociaciones, con el objetivo de impulsar la transformación y el fortalecimiento del sistema de salud mediante el uso de tecnologías más avanzadas.
«Estamos trabajando en estandarizar la información y adoptar tecnologías habilitadoras, como el código de barras, que permitan un registro puntual de los medicamentos en todas las etapas de su ciclo de vida», afirmó López.
Asimismo, López hizo un llamado a todos los actores del sector farmacéutico a unirse y promover un marco regulatorio que facilite el desarrollo de la digitalización en el ámbito de la salud en México. «La pieza faltante para impulsar la digitalización de la salud es la promoción de estándares, marcos regulatorios y políticas públicas por parte del Gobierno», enfatizó.
¿Cómo se puede detectar si un medicamento está falsificado?

Detectar si un medicamento está falsificado puede ser un desafío. Una forma de hacerlo es verificando la fuente de compra. Es crucial comprar medicamentos solo en farmacias autorizadas y establecimientos reconocidos para reducir el riesgo de adquirir productos falsificados. Además, es importante examinar cuidadosamente el empaque y el etiquetado del medicamento en busca de errores de ortografía, impresiones borrosas u otras anomalías que puedan indicar falsificación.
Otro método es comprobar la apariencia del medicamento. Comparar su aspecto con imágenes de referencia proporcionadas por el fabricante o disponibles en línea puede ayudar a detectar discrepancias. Asimismo, es fundamental examinar el número de lote y la fecha de caducidad impresos en el envase y verificar que coincidan con la información proporcionada por el fabricante.
Si persisten las dudas sobre la autenticidad de un medicamento, es crucial consultar a un profesional de la salud de confianza. Los médicos, farmacéuticos u otros expertos pueden ayudar a verificar la autenticidad del medicamento y proporcionar orientación sobre su uso seguro.
Algunos fabricantes ofrecen herramientas en línea o aplicaciones móviles que permiten a los consumidores verificar la autenticidad de sus productos mediante códigos QR o números de lote específicos. Estas herramientas pueden ser útiles para verificar la legitimidad de un medicamento.
Además, es importante estar alerta a los precios inusualmente bajos. Los medicamentos falsificados a menudo se venden a precios significativamente más bajos que los productos genuinos. Ser cauteloso con las ofertas que parecen demasiado buenas para ser verdad puede ayudar a evitar la compra de medicamentos falsificados.