Ola de calor en México: Más de la mitad del país enfrenta temperaturas extremas

Ola de calor en México: Más de la mitad del país enfrenta temperaturas extremas

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La segunda ola de calor del año golpea a México con fuerza, llevando consigo temperaturas abrasadoras que superan los 40 grados Celsius en 23 estados del país. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), más de dos tercios de los estados, incluidos 12 con índices que superan los 45 grados, se verán afectados por este fenómeno.

Créditos: SWI

Los estados más afectados por las altas temperaturas, con pronósticos superiores a los 45 grados, incluyen Campeche, Chiapas, Guerrero, Hidalgo, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán. Mientras tanto, otros estados experimentarán temperaturas que oscilarán entre los 40 y 45 grados.

Este calor sofocante se atribuye a una circulación anticiclónica en niveles medios de la atmósfera, según explicó el SMN. Ante esta situación, se insta a la población a tomar medidas preventivas, como evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratados y prestar especial atención a los enfermos crónicos, niños y adultos mayores.

La alta demanda de electricidad debido al calor provocó apagones masivos en ciudades de casi la mitad de los estados del país, lo que llevó al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) a declarar una emergencia en el sistema eléctrico. Además, el SMN informa que solo se esperan intervalos de chubascos en algunas regiones, mientras que otras podrían experimentar lluvias aisladas.

El Gobierno mexicano había anticipado al menos cinco episodios de olas de calor que azotarían el país entre los meses de marzo y julio. Estas previsiones se basaron en análisis climáticos y modelos meteorológicos que indicaban un aumento en la frecuencia e intensidad de estos eventos extremos debido a condiciones atmosféricas específicas y al cambio climático global.

La realidad ha confirmado estas proyecciones, y el impacto de estas olas de calor ya se está dejando sentir de manera contundente. Las altas temperaturas están provocando un aumento en los casos de personas afectadas por el calor, incluyendo lamentablemente, casos fatales. La exposición prolongada a temperaturas extremas puede tener consecuencias graves para la salud, especialmente para los grupos más vulnerables como los adultos mayores, los niños y las personas con enfermedades crónicas.

El panorama se agrava con la aparición de registros históricos de temperatura, como el alcanzado en la Ciudad de México el 15 de abril, cuando el termómetro marcó 34,2 grados Celsius. Esta cifra superó el récord anterior registrado en 1998, lo que evidencia el aumento de la intensidad del calor en la región y la gravedad del impacto que esto puede tener en la población y en el medio ambiente.

En medio de esta ola de calor extrema, las autoridades instan a la población a mantenerse informada, tomar precauciones y seguir las recomendaciones de salud pública para evitar riesgos relacionados con el calor.

¿Por qué se presentó esta ola de calor?

La segunda ola de calor en México se debe principalmente a la presencia de una circulación anticiclónica en niveles medios de la atmósfera. Los sistemas de alta presión, como los anticiclones, generan condiciones de estabilidad atmosférica que limitan la formación de nubes y precipitaciones, lo que resulta en cielos despejados y radiación solar directa sobre la superficie terrestre.

Cuando esta circulación anticiclónica se establece sobre una región durante un período prolongado, como en el caso de esta ola de calor, puede provocar un aumento significativo de las temperaturas. El aire cálido y seco se ve atrapado bajo el anticiclón, lo que contribuye a un calentamiento adicional de la atmósfera y de la superficie terrestre.

Además, factores como la temporada del año y la latitud geográfica también pueden influir en la intensidad y duración de las olas de calor. En el caso de México, que se encuentra en latitudes subtropicales y tropicales, la ola de calor es común durante la temporada de primavera y verano debido a la mayor incidencia de la radiación solar y la menor presencia de precipitaciones.

Es importante destacar que las olas de calor son fenómenos climáticos naturales, pero su intensidad y frecuencia pueden estar siendo influenciadas por el cambio climático. El aumento de las temperaturas globales debido a la actividad humana puede estar exacerbando estos eventos extremos, haciendo que sean más frecuentes e intensos en algunas regiones del mundo, incluido México.

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