El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció este lunes su determinación de continuar al frente del Ejecutivo «con más fuerza si cabe», luego de un periodo de reflexión provocado por lo que él consideró una campaña de acoso y derribo en su contra y contra su esposa.
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En una declaración realizada en el Palacio de la Moncloa, sede de la Presidencia del Gobierno, Sánchez puso fin a las especulaciones sobre la posibilidad de que presentara su dimisión, afirmando: «He decidido seguir, con más fuerza si cabe, al frente de la Presidencia del Gobierno de España». Asimismo, expresó su compromiso de trabajar «sin descanso, con firmeza» por la regeneración pendiente y el avance de derechos y libertades en el país.
Sánchez había reflexionado sobre la campaña de «acoso y derribo» que, según él, llevan a cabo la oposición conservadora (Partido Popular) y la extrema derecha (Vox), así como medios y organizaciones de derecha y ultraderecha, que también han dirigido ataques contra su esposa, Begoña Gómez.
En su declaración, el presidente español señaló que esta decisión marca un punto y aparte, no un punto y seguido, y afirmó que «solo hay una manera de revertir esta situación»: que la mayoría social se movilice en defensa de la dignidad y el sentido común.
Sánchez recibió apoyos de ministros, dirigentes, militantes y simpatizantes del Partido Socialista para que no abandonara el Ejecutivo, así como de otras fuerzas políticas y sindicatos. Agradeció las muestras de solidaridad y empatía recibidas, y reiteró su determinación de seguir adelante.
La denuncia contra Begoña Gómez fue presentada por el Colectivo de Funcionarios Públicos Manos Limpias, un «sindicato» ultraderechista que ha interpuesto denuncias contra corrupciones políticas o económicas.
Esta decisión de Sánchez marca un momento crucial en la política española y refleja su compromiso con la estabilidad y el progreso del país en medio de un contexto político polarizado y desafiante.