Por primera vez, se ha observado a un orangután aplicando una planta tropical para tratar una herida, revelando un comportamiento hasta ahora desconocido en animales salvajes.
Créditos: Euronews
El orangután, llamado Rakus, fue visto masticando hojas de una planta medicinal utilizada en el sudeste asiático para aliviar el dolor y la inflamación. Posteriormente, aplicó los jugos de la planta en una herida abierta en su mejilla derecha, usando la hoja como un vendaje improvisado.
Este comportamiento fue observado por científicos en el Parque Nacional Gunung Leuser de Indonesia en 2022 y documentado en un estudio publicado en ‘Scientific Reports’. Ulil Azhari, investigador de campo del Proyecto Suaq en Medan (Indonesia), capturó el momento en el que la herida de Rakus se cerró en un mes sin complicaciones.
Los primates, incluidos los orangutanes, han sido documentados usando plantas para tratar una variedad de dolencias, desde problemas estomacales hasta parasitosis. Estas observaciones han llevado a los científicos a concluir que los primates tienen un conocimiento innato o aprendido sobre las propiedades medicinales de ciertas plantas, y que pueden utilizar esta información para tratar sus enfermedades.
Sin embargo, la observación de Rakus aplicando directamente una planta medicinal en una herida va un paso más allá. Esto sugiere no solo un conocimiento de las propiedades curativas de la planta, sino también la capacidad de aplicar ese conocimiento de manera específica y precisa para tratar una lesión específica.
«Es la primera vez que observamos a un animal salvaje aplicar directamente sobre una herida una planta medicinal muy potente», explicó Isabelle Laumer, bióloga del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal de Constanza (Alemania), y coautora del estudio.
¿Cómo aprendió esto el orangután?
Los científicos creen que Rakus pudo haber aprendido a utilizar esta planta medicinal observando a otros orangutanes que vivían fuera del área de estudio y que no estaban siendo observados de cerca por los investigadores. Es común en muchas especies animales, incluidos los primates, aprender nuevas conductas y habilidades al observar a otros miembros de su especie.
En el caso de Rakus, su experiencia previa como joven orangután herido podría haberlo llevado a descubrir por sí mismo las propiedades medicinales de esta planta. Los orangutanes, al igual que otros primates, tienen la capacidad de experimentar y aprender de forma independiente, lo que les permite adaptarse a diferentes situaciones y encontrar soluciones a problemas, como el alivio del dolor y la curación de heridas.
Es posible que Rakus haya experimentado previamente los beneficios de esta planta al tratar otras lesiones o dolencias menores antes de que los científicos tuvieran la oportunidad de observarlo. Esta capacidad de automedicación en los animales sugiere un alto nivel de inteligencia y adaptabilidad en especies como los orangutanes, que pueden utilizar recursos naturales para mantener su salud y bienestar.
