Es una figura legendaria en el mundo del vino. Considerado por muchos como el pionero del Malbec argentino y el artífice del renacimiento vinícola de California, ha dejado una marca indeleble en la industria.
En 2013, Forbes US aclamó a Paul Hobbs como el “Steve Jobs del vino”, subrayando su influencia y genialidad. Desde 1998, ha canalizado su pasión en Viña Cobos, su bodega argentina fundada junto con los enólogos argentinos Andrea Marchiori y Luis Barraud, Es evidente que, el renombrado enólogo estadounidense, ha dejado una huella indeleble en el mundo del vino argentino.
A propósito, si deseas adquirir los vinos de Hobbs, lo puedes hacer en La Vinoteca. Ellos son al mismo tiempo representantes y distribuidores de la bodega.
Nació en Nueva York, y creció en una familia de agricultores. Su interés por el vino surgió mientras estudiaba en la Universidad de Notre Dame, donde tomó un curso sobre vinos que despertó su pasión por la enología. Posteriormente, se graduó en Viticultura y Enología en la Universidad de Davis, California, en donde estudian los mejores enólogos de Estados Unidos.
El deseo de enfrentar nuevos desafíos, lo llevó primero a Chile y luego a Argentina, donde se percató del potencial del Malbec para conquistar paladares globales.
Comenzó su travesía en la industria vitivinícola en Bodega Catena Zapata a principios de la década de los noventa, tras haber acumulado experiencia en bodegas destacadas como Opus One de Robert Mondavi, y otras del grupo Louis Vuitton Moët Hennessy, en su país natal.
Posteriormente, surgió su proyecto propio, Viña Cobos, y que celebra dos décadas de convertir sueños en realidad. La génesis de esta empresa se remonta a 1997, cuando Hobbs, compartiendo su visión con su esposa de entonces, Mariela, buscaba socios locales para lograr un ambicioso emprendimiento: elaborar un Malbec de clase mundial, en una bodega de culto.
Cómo lograr un Malbec argentino de clase mundial: todo comienza por el terroir
Todo comienza por comprender y respetar el terroir, para lograr que el vino exprese de manera auténtica el lugar de donde proviene. Es increíble cómo logra que las características únicas un terroir como Luján de Cuyo, en Mendoza, se manifiesten en una copa.
Luján de Cuyo: cuna de la excelencia del Malbec
Nos detenemos un momento en el terroir, en Luján de Cuyo, para entender cómo encontrar la expresión del terroir, en un Malbec de Hobbs. Ubicado a una altitud que oscila entre los 800 y 1100 msnm, facilita una amplitud térmica increíble que favorece la maduración lenta y uniforme de las uvas. El resultado: Malbecs equilibrados, de aromas y sabores frescos.
Los veranos calurosos, los inviernos fríos, asegura una óptima maduración de la uva, en tanto las noches frescas, mantienen la acidez y estructura de los Malbecs. El resultado: taninos suaves, aromas intensos. En tanto los suelos aluviales, aportan mineralidad que se refleja en la textura y lmatices del vino en la copa.
Es así como los Malbecs de esta Denominación de Origen, presentan aromas a ciruelas, zarzarmoras, cerezas; violetas, especias, notas herbales, terrosas; taninos suaves, sedosos, enmarcados en un precioso color púrpura intenso, profundo, seductor.
Vitivinicultura sostenible
Lo anterior es posible, gracias a prácticas enológicas y técnicas de viticultura sostenibles. Por ejemplo, se preocupan por la salud del suelo y la biodiversidad; en la bodega emplean fermentaciones naturales y evitan al mínimo intervenid en un proceso natural como convertir el azúcar en alcohol.
Aunque no lo creamos, esa mínima intervención, permite que el carácter de la fruta de esa futura cosecha de Malbec, se exprese plenamente; sumado a la atención al detalle en cada etapa del proceso de producción, buscar la autenticidad y la calidad.
Actualmente, Viña Cobos se ha asociado con el Grupo Molinos para expandir su alcance, manteniendo el compromiso con la calidad y la excelencia enológica. En tanto Hobbs, continúa explorando y desarrollando proyectos vinícolas en otras regiones, como el Valle de Uco, Patagonia, Salta y San Juan.
Paul Hobbs ha demostrado ser un enólogo visionario, continuamente buscando nuevas regiones y terroirs en Argentina para elaborar vinos de clase mundial. Su intrés y curiosidad, refleja su compromiso con la innovación y la excelencia en la viticultura. A través de estos esfuerzos, Hobbs no solo enriquece su propuesta de vinos, sino que también contribuye al crecimiento y la diversificación de la industria vinícola argentina.
