La segunda ola de calor del año en México llega a su fin este lunes después de afectar al país desde el 3 de mayo, dejando a su paso al menos 14 muertes y temperaturas superiores a los 40 grados en numerosos estados, según informa el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Créditos: SWI
Durante este periodo, se han registrado récords de temperatura en 10 ciudades mexicanas, incluyendo la Ciudad de México, que alcanzó una marca histórica de 34,3 grados el 9 de mayo. Esta ola de calor ha afectado principalmente a las regiones costeras del sur y sureste del país, así como al Golfo de México y la Península de Yucatán.
Los informes de los Servicios de Salud revelan una situación preocupante en varias regiones de México debido a la segunda ola de calor. Hasta el momento, se han registrado 10 muertes por golpes de calor en el estado de San Luis Potosí, dos en Oaxaca y una en Tabasco, junto con otra en Mazatlán confirmada por la Cruz Roja.
Sin embargo, estas cifras podrían no reflejar completamente el impacto mortal de la ola de calor. Se estima que el número total de fallecimientos podría superar los 20, si se tienen en cuenta las defunciones reportadas por la prensa local y aquellas aún en estudio en áreas como Chiapas, Hidalgo y Tamaulipas. Esta posibilidad sugiere una situación aún más grave de lo que indican los informes oficiales hasta ahora.
A pesar de que la segunda ola de calor llega a su fin, el SMN advierte que el ambiente extremadamente caluroso persistirá en algunas zonas del país. Se pronostican temperaturas de hasta 45 grados en estados como Campeche, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, mientras que en otros estados se esperan máximas de 40 a 45 grados.
Ante estas condiciones, se recomienda a la población tomar medidas preventivas, como evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratado y prestar especial atención a grupos vulnerables como enfermos crónicos, niños y adultos mayores.
Además, la demanda de electricidad debido al calor ha provocado apagones masivos, lo que llevó al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) a declarar emergencias en el sistema eléctrico en días pasados. Sin embargo, se informa que el suministro eléctrico está siendo cubierto de forma continua desde el sábado.
El Gobierno mexicano, consciente de la recurrente presencia de olas de calor en el país durante los meses de marzo a julio, había anticipado la posibilidad de al menos cinco eventos de este tipo para el presente año. Esta previsión refleja la necesidad de que la población se prepare adecuadamente para enfrentar condiciones climáticas extremas en los próximos meses.
Las olas de calor representan un desafío significativo para la salud y el bienestar de la población, especialmente para grupos vulnerables como los niños, los ancianos y las personas con enfermedades crónicas. Ante la frecuencia y la intensidad con la que estas olas de calor están ocurriendo, es crucial que se tomen medidas preventivas y se implementen planes de acción para mitigar sus efectos adversos.
Medidas para protegerse en una ola de calor
Entre estas medidas, se encuentran la promoción de la hidratación adecuada, la búsqueda de refugio en lugares frescos durante las horas más calurosas del día, la reducción de la exposición al sol directo y el monitoreo constante de la salud, especialmente en aquellas personas más susceptibles a sufrir golpes de calor u otras complicaciones relacionadas con el calor.
Además, es fundamental que las autoridades continúen fortaleciendo los sistemas de alerta temprana y los planes de respuesta ante emergencias relacionadas con el clima, así como promover la conciencia pública sobre la importancia de la adaptación al cambio climático y la adopción de prácticas sostenibles para reducir su impacto a largo plazo.
