El sismo causó grandes daños, incluyendo casas colapsadas. La cantidad de víctimas fatales ascendía a 126. Las temperaturas bajo cero complicaban las maniobras de rescate.
Créditos: Reuters, Infobae, AP

Un terremoto de magnitud 6,2 sacudió una de las regiones más pobres de China poco antes de la medianoche del lunes, produciendo una catástrofe al matar al menos a 126 personas, hiriendo a cientos y derribando casas de adobe en aldeas remotas.
El sismo de magnitud 6,2 ocurrió justo antes de la medianoche del lunes e hirió a más de 700 personas, además de dañar viviendas y caminos y derribar cables de luz y comunicaciones en las provincias de de Gansú y Qinghai, según autoridades y medios chinos.
Responsables de emergencias en la provincia de Gansu pidieron 300 trabajadores adicionales para buscar en edificios derruidos y otras labores de búsqueda y rescate. Las autoridades en la vecina Qinghai informaron de 20 desaparecidos en un alud de tierra.
El sismo, se produjo en el condado de Jishishan, en Gansu, a unos 5 kilómetros del límite provincial con Qinghai, derrumbó casas y causó otros daños significativos, haciendo que la gente saliera corriendo a la calle en busca de seguridad.
La cadena estatal CCTV informó de daños en las líneas de agua y electricidad, así como en las infraestructuras de transporte y comunicaciones.
El sismo se sintió en Lanzhou, capital de la provincia de Gansu, a unos 1.450 kilómetros al suroeste de la capital, Beijing.
Más de 155.000 viviendas dañadas o destruidas por el terremoto en China

Las autoridades han movilizado una serie de respuestas de emergencia después de que el terremoto destruyó carreteras e infraestructura, provocó deslizamientos de tierra y semienterró una aldea bajo el cieno. Pero el trabajo de rescate ha resultado desafiante en temperaturas bajo cero, después de que una poderosa ola de frío arrasara el país.
Los terremotos son comunes en provincias como Gansu, situada en el límite nororiental de la meseta tectónicamente activa Qinghai-Tibetana. El terremoto más mortífero de China en las últimas décadas se produjo en 2008, cuando uno de magnitud 8,0 sacudió Sichuan y mató a casi 70.000 personas.
Alrededor de 2.200 efectivos del departamento de bomberos provincial de Gansu y 900 de la brigada forestal, así como 260 trabajadores profesionales de rescate de emergencia, fueron enviados a la zona del desastre, informó la agencia de noticias Xinhua, añadiendo que también se desplegaron cientos de militares y policías.
La provincia, que ha asignado 20 millones de yuanes (2,8 millones de dólares) al gobierno local para la respuesta de emergencia, también envió suministros que incluían 2.600 tiendas de campaña de algodón, 10.400 camas plegables, 10.400 edredones, 10.400 colchones de algodón y 1.000 juegos de estufas.
Los funcionarios del condado de Jishishan, con una población de aproximadamente 260.000 personas repartidas en numerosas aldeas y municipios, dijeron que el gobierno local, al carecer de recursos, tenía que depender del gobierno provincial. Gansu se encuentra entre las provincias más pobres de China.
Temperaturas bajo cero complican los rescates tras el terremoto en China

Como el área del desastre se encuentra en una región de gran altitud donde el clima es frío, los esfuerzos de rescate están trabajando para prevenir desastres secundarios causados por factores ajenos al terremoto, dijo Xinhua.
La temperatura en Linxia, Gansu, cerca de donde ocurrió el terremoto, era de aproximadamente -14 grados Celsius (6,8 Fahrenheit) el martes por la mañana.
Aunque las 72 horas posteriores a un terremoto son el momento más probable para rescatar a los sobrevivientes, ese período se verá acortado por el mal tiempo, y las víctimas atrapadas enfrentarán un mayor riesgo, dijo.
Algunas infraestructuras de agua, electricidad, transporte, comunicaciones y otras infraestructuras han resultado dañadas.
Decenas de carreteras y caminos rurales resultaron dañados en medio de múltiples deslizamientos de tierra, aunque no se reportaron víctimas.
Sin embargo, una importante represa hidroeléctrica a 50 kilómetros del epicentro no resultó afectada por el terremoto. CCTV informó que la presa, en la parte superior del río Amarillo, estaba funcionando con normalidad.
En una aldea de Qinghai, el terremoto provocó un deslizamiento de tierra que dejó muchas casas medio cubiertas de limo marrón. Los equipos de rescate han desplegado drones, excavadoras y topadoras para encontrar y rescatar a los supervivientes, informaron los medios locales.
Los temblores se sintieron hasta a 1.000 kilómetros de distancia en la provincia central de Henan, donde los medios de comunicación locales compartieron vídeos de muebles balanceándose en las casas de las personas.
Despertados por el terremoto, los residentes abandonaron sus edificios y se dirigieron a áreas abiertas por seguridad, informó el medio de comunicación local Jimu, mostrando una fotografía de personas acurrucadas en gruesas mantas al aire libre.
El análisis preliminar muestra que el terremoto fue una ruptura de tipo empuje, uno de los tres de magnitud superior a 6 que se han producido a menos de 200 kilómetros del epicentro desde 1900. Los medios estatales informaron de al menos 32 réplicas en la hora posterior al terremoto.
Los funcionarios de Gansu dijeron a los periodistas que el último terremoto fuerte de al menos magnitud 5,0 que se produjo dentro de los 100 kilómetros del epicentro fue en 2019.
El martes por la mañana se registraron un total de nueve réplicas de magnitud 3,0 o superior, dos de las cuales fueron de al menos 4,0 de magnitud.
A unos 3.000 kilómetros de Jishishan, en la región de Xinjiang, se produjo otro terremoto a las 09:46 horas (01:46 GMT) del martes, con una magnitud de aproximadamente 5,5 y a una profundidad de 10 kilómetros.