El Ejército israelí ha anunciado una ampliación de la ofensiva militar en Rafah mediante la incorporación de «fuerzas adicionales», a pesar de las crecientes presiones a nivel internacional y el recrudecimiento de la violencia en la frontera septentrional con Líbano.
Créditos: EFE
Esta escalada coincide con los ataques diarios de la milicia Hizbulá en la frontera, que ocurren en paralelo a los enfrentamientos en la Franja de Gaza.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, durante una visita al cuartel de la división 162 cerca de Rafah, afirmó que «esta operación continuará con la incorporación de fuerzas adicionales en Rafah. Nuestras tropas han logrado destruir varios túneles en la zona y pronto serán eliminados más. Esta actividad se intensificará», según lo expresado en un comunicado emitido hoy por su departamento.
Además, Gallant señaló que la incursión militar en Rafah, iniciada el 6 de mayo pasado y que ha provocado el desplazamiento forzoso de más de 450.000 gazatíes, está debilitando a Hamás y evitando su capacidad de «regeneración», como ya ha sucedido en muchas áreas del norte.
A pesar de la continuación de la ofensiva israelí, la situación en Gaza sigue siendo crítica, con civiles falleciendo en bombardeos contra viviendas y ataques de artillería. Según fuentes médicas citadas por la agencia palestina Wafa, al menos cuatro personas murieron hoy, incluida una mujer embarazada, en el campamento de refugiados de Jabalia.
En tanto, en Yabalia, al menos cinco soldados israelíes murieron ayer por «fuego amigo», y otros siete resultaron heridos, tras un incidente donde un tanque israelí disparó dos veces contra un edificio en el que se encontraban, según una investigación preliminar de medios locales.
En otro lamentable suceso, al menos diez niños perdieron la vida esta mañana en la ciudad de Gaza, cuando aviones de combate israelíes bombardearon las viviendas de tres familias en diferentes áreas, según reportes de la Media Luna Roja Palestina. El total de niños fallecidos en esta guerra ha superado los 15.000, informó hoy la agencia.
La falta de combustible para los generadores, que mantienen operativos a pocos hospitales, pone en riesgo la vida de recién nacidos, embarazadas y pacientes en cuidados intensivos, según un informe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA). Esta escasez se atribuye a la invasión militar israelí en Rafah, que comenzó hace diez días y ha obstaculizado la entrada de suministros por el cruce fronterizo.
La respuesta ante las acciones de Israel
En respuesta a esta crisis humanitaria, Estados Unidos anunció hoy el inicio de operaciones de un muelle flotante en la costa de Gaza, facilitando la entrega de aproximadamente 500 toneladas de ayuda en los próximos dos días, con el objetivo de asistir a más de dos millones de personas en riesgo de hambruna.
Mientras tanto, la tensión en la frontera norte de Israel se agrava, con tres soldados heridos hoy, uno de ellos gravemente, en la localidad israelí de Metula tras un ataque con un dron explosivo. Dos miembros de Hizbulá también perdieron la vida en el sur de Líbano debido a un bombardeo israelí contra un vehículo en el distrito de Tiro.
Hizbulá reivindicó el lanzamiento de al menos 60 cohetes contra objetivos militares en el norte de Israel en las últimas horas, en respuesta a los bombardeos israelíes en el sur del país. Estos enfrentamientos, que iniciaron en octubre en el contexto de la guerra de Gaza, son los más graves desde el conflicto de 2006 y han cobrado la vida de más de 400 personas, mayormente en el lado libanés y en las filas de Hizbulá. La escalada en los enfrentamientos hace temer una guerra abierta entre Israel y Líbano.
