Una tragedia en México ha dejado una peruana fallecida y un número aún no confirmado de víctimas, luego de que un grupo armado atacara una caravana de migrantes en el estado de Sonora. Ana Vidal, de 28 años, fue identificada como una de las víctimas mortales del violento incidente.
Según informes, los afectados viajaban en un vehículo hacia la frontera de Estados Unidos cuando fueron atacados por el grupo armado. Además de Ana Vidal, se reporta la muerte de un niño ecuatoriano de cuatro años y una mujer hondureña.
El Consulado de Perú en México está gestionando la repatriación del cuerpo de Ana Vidal, mientras que aún se desconoce el paradero de otros posibles afectados en la frontera. La embajada de Perú en México y el Ministerio de Relaciones Exteriores no han emitido declaraciones sobre el incidente hasta el momento.
El hermano de Ana Vidal narró el ataque, describiendo cómo el vehículo en el que viajaban fue embestido por otro automóvil antes de que un grupo de hombres armados comenzara a disparar contra los ocupantes. El hermano de Ana expresó su angustia y desesperación por la situación de su hermana, quien fue declarada inicialmente como desaparecida.
El ataque ocurrió en Sáric, al norte de Sonora, y fue asistido por asociaciones dedicadas al apoyo de migrantes, quienes trasladaron a los sobrevivientes y heridos al Hospital de Hermosillo. Sin embargo, el incidente se ha manejado con discreción debido al temor a represalias por parte de los grupos delincuenciales involucrados.
El relato de un sobreviviente revela el horror del ataque, donde se describe cómo los atacantes utilizaron armas de fuego y hasta lanzagranadas. Actualmente, ocho personas han sido detenidas en la frontera en relación con el incidente, y se han incautado armas de fuego, cargadores y chalecos tácticos durante el operativo de las fuerzas del orden federales.
Frontera entre México y Estados Unidos, la más peligrosa del mundo
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha revelado cifras alarmantes que posicionan a la frontera entre Estados Unidos y México como la ruta migratoria terrestre más mortal del mundo. Durante el año 2022, se registraron 686 personas migrantes fallecidas o desaparecidas a lo largo de esta frontera, lo que representa casi la mitad de las 1.457 muertes y desapariciones documentadas en las Américas ese año, marcando el 2022 como el más fatal desde que comenzó el Proyecto Migrantes Desaparecidos de la OIM en 2014.
Si bien estos números muestran una disminución del 6% en comparación con el año anterior, los datos aún podrían subestimar la realidad debido a la falta de información oficial, incluyendo la procedente de las oficinas del forense del condado fronterizo en Texas y de la agencia mexicana de búsqueda y rescate.
Los peligrosos cruces de los Desiertos de Sonora y de Chihuahua representaron casi la mitad de las muertes registradas en esta frontera, siendo estos lugares mucho más inhóspitos que otras regiones desérticas donde prevalece la migración irregular. Además, el incremento de muertes a lo largo de las rutas migratorias en el Caribe, con 350 decesos documentados en 2022, refleja una tendencia preocupante.
El Darién, una zona selvática en la frontera entre Panamá y Colombia, también fue testigo de 141 muertes documentadas de migrantes en 2022, aunque se estima que esta cifra podría ser mayor debido a la naturaleza remota y peligrosa de la región, así como la presencia de pandillas criminales.
Las encuestas realizadas por la OIM a personas que han realizado estos cruces revelaron que 1 de cada 25 personas encuestadas mencionaron que algunas de las personas que viajaron con ellos habían desaparecido. Estos datos, aunque no totalmente representativos, son preocupantes teniendo en cuenta el alto flujo migratorio registrado en la región.
«El hecho de que sepamos tan poco acerca de los migrantes que desaparecen en las Américas es desalentador», dijo Marcelo Pisani, Director Regional de la OIM para América del Sur. «Los impactos en las familias que son dejadas atrás en la búsqueda interminable de un ser querido desaparecido son verdaderamente profundos».
