Por: Sandra Fernández, sommelier independiente mexicana, maestra tequilera, Certified Wine Professional, Certified Wine Educator y Certified Specialist in Spirits.
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Créditos: Jancis Robinson, Jordi Melendo, Champagne Virginie T., Drappier, Domaine Henri Giraud y David L´éclapart
La emblemática región de Champagne está viviendo una nueva ola de petites maisons du champagne. Estas pequeñas casas boutique buscan alejarse totalmente de las grandes y reconocidas casas productores, y de marcas poderosas que han acaparado el mundo de los espumosos de élite. De alguna forma, retan la reputación de las anteriores, ya que estas no brindan al consumidor información sobre el origen exacto de las uvas, tipo de levadura y otros procesos como los gramajes de azúcar en el dosaje final.
Virginie T., Drappier, Domaine Henri Giraud, David L´éclapart y Telmont son algunas de las pequeñas empresas familiares que representan la nueva ola de petites maisons du champagne que ya se pueden comprar en México.
¿Cómo son los nuevos productores de champagne?
Para comenzar, estos nuevos productores de champagne son dueños de sus viñedos y de sus terrenos. Sus viñedos son ecológicos, orgánicos y hasta biodinámicos. Además, son productores de sus propios champagnes; es decir, no compran la uva a nadie, ni la procesan en casa de otros; en tanto buscan antes que nada la expresión del terroir en sus ejemplares.
La nueva ola de productores de champagne también busca «transparentar» al consumidor la trazabilidad total de la uva y el proceso de producción.
Asimismo, no elaboran grandes mezclas homogéneas como es costumbre, sienten que cada embotellado es único y no debe parecerse al anterior.
Esta práctica aleja a los nuevos productores de la fórmula tradicional de estandarizar, y de hacen varios champagnes a partir de un solo viñedo (single vineyard champagne).
Otra de las novedades, es que están utilizando más uvas tintas como Pinot Noir y Meunier en sus mezclas, más que la tradicional Chardonnay. De igual manera también se apoyan en otros varietales permitidos como Arbanne, Pinot Blanc y Petit Meslier, con resultados exitosos.
En cuanto a la fermentación, se inclinan por usar madera, sumado a la implementación de bajos porcentajes de dosaje. Otra novedad es que ponen contra etiquetas en la botella, repletas de información útil para el consumidor final.
Nuevos agricultores de la vid
Al no contar con un presupuesto robusto, la nueva ola de productores de champagne está haciendo «mucho ruido».
Además al ser pequeñas y considerarse «minoría» comparadas con las grandes productoras, se agrupan en asociaciones que les permite ganar «más fuerza» y darse a conocer de una mejor manera.
Por otro lado, los miembros de las petites maisons du champagne son considerados como los nuevos agricultores de la vid, y quieren parecer que lo son. Ya no usan trajes ni corbata, parte del antiguo protocolo. Los reemplazaron por jeans, camisetas y camisas «desfajadas».
Es así como los nuevos agricultores de la vid quieren dirigirse a paladares modernos que buscan «la diferencia», y que están cansados de que todos los champagnes de las grandes casas «sepan a lo mismo», debido a su estandarización.
Sin duda, estas nuevas casas emocionan y generan curiosidad. Por eso, si eres un amante de las burbujas, te invito a que comiences desde ya a apreciar lo que las nuevas petites maisons du champagne tienen para ofrecer.
